El pan de canela es un clásico atemporal, perfecto para cualquier ocasión pero especialmente reconfortante durante la temporada de otoño. El cálido aroma a canela y pan recién horneado que flota en la casa es suficiente para hacer que a cualquiera se le haga la boca agua. Lo que hace que esta receta sea aún mejor es su simplicidad y el hecho de que probablemente ya tengas todos los ingredientes en tu despensa. Profundicemos en el proceso y exploremos algunos consejos y variaciones para mejorar su experiencia con el pan de canela.
Ingredientes:
Harina para todo uso: Esta harina versátil proporciona la estructura al pan.
Azúcar granulada: añade dulzura al pan y ayuda a dorarlo.
Polvo para hornear y bicarbonato de sodio: Agentes leudantes que le dan al pan su textura ligera y aireada.
Canela: El ingrediente estrella, que proporciona ese sabor cálido y picante.
Sal: Equilibra el dulzor y realza los sabores.
Suero de leche: Agrega humedad y un ligero sabor picante al pan.
Aceite Vegetal: Mantiene el pan húmedo y tierno.
Huevos: Unen todo y contribuyen a la estructura del pan.
Extracto puro de vainilla: agrega profundidad de sabor y complementa maravillosamente la canela.
Para el remolino: una simple mezcla de azúcar, canela y mantequilla derretida crea un delicioso remolino de canela en todo el pan.
El proceso:
Para continuar leyendo, desplácese hacia abajo y haga clic en Siguiente 👇👇
